Probióticos

Fermentación vs. Encurtido

En el post anterior, hablamos del sistema inmunitario y de los alimentos probióticos y naturales. Hoy aclararemos las diferencias entre los productos fermentados y los encurtidos.

Tanto el proceso de fermentación como el de encurtido son métodos de conservación de los alimentos, la diferencia fundamental está en la presencia o no de probióticos.

Los probióticos son cepas de bacterias y levaduras vivas capaces de comunicarse y colonizar la microbiota intestinal, algo que tiene demostrados beneficios sobre la salud. Aquí citamos los principales:

  • Refuerzan el sistema inmunitario
  • Reducen los niveles de inflamación
  • Incrementan la diversidad bacteriana del intestino
  • Previenen la diabetes tipo 2
  • Previenen las enfermedades metabólicas
  • Mejoran trastornos digestivos como el síndrome del intestino permeable, colitis ulcerosa, etc.
  • Previenen y reducen los síntomas de alergias alimentarias
  • Previenen y reducen los síntomas de la diarrea infecciosa
  • Mejoran la presión arterial
  • Mejoran el perfil lipídico en sangre
  • Protegen contra la infección por H. pylori
  • Mejoran de la salud vaginal y previenen infecciones de las vías urinarias

Encurtidos

Un alimento encurtido es un alimento preservado en un medio ácido, generalmente vinagre, agua y sal. El vinagre actúa como conservante a la vez que evita la fermentación, de modo que los encurtidos no tienen probióticos.

Fermentados

Un alimento fermentado es un alimento preservado mediante un proceso de lactofermentación, que se activa en presencia de una salmuera (agua con sal) y la ausencia de oxígeno. Los fermentados sí tienen probióticos.

La lactofermentación se produce cuando las bacterias y levaduras, naturalmente presentes en las verduras, se ven privadas de oxígeno a causa del propio método de elaboración y envasado del alimento. Esas bacterias y levaduras se alimentan de los carbohidratos de la verdura, transformándolos en distintas cepas de probióticos que al ser ingeridos poblarán o reforzarán nuestra propia microbiota.

Durante la lactofermentación de las verduras no interviene ningún tipo de lácteo, se llama así porque el proceso metabólico genera dos subproductos: ácido láctico y dióxido de carbono. Eso es lo que les otorga esa acidez tan característica.

Se podría decir pues que un alimento probiótico es un alimento vivo, siempre y cuando no haya sido pasteurizado.